Nuestros consejos para un viaje tranquilo y con confianza
Es una pregunta que escuchamos a menudo cuando hablamos con viajeros que están organizando su viaje:
“¿Es seguro viajar a Perú? ¿Hay algún riesgo?”
Es completamente normal hacerse esa pregunta antes de viajar tan lejos. Viajar a Sudamérica puede generar ciertas dudas, sobre todo cuando uno lee todo tipo de cosas contradictorias en internet. Pero que no cunda el pánico: con un poco de sentido común, algunas precauciones y la información adecuada, Perú es un destino perfectamente acogedor y accesible.
En este artículo compartimos nuestra experiencia directa sobre la seguridad en el día a día, y también algunos consejos de salud para evitar pequeños inconvenientes durante el viaje.
Seguridad en Perú: lo que hay que saber
Un país seguro en las zonas turísticas
En las zonas más visitadas por los viajeros —como Cusco, Machu Picchu, Arequipa, el Valle Sagrado, el lago Titicaca, la costa del Pacífico o la Amazonía— la seguridad es, en general, buena. Hay una fuerte presencia turística, y las autoridades locales prestan especial atención a estos espacios.
Los peruanos son cálidos, atentos y muy respetuosos con los visitantes. En Cusco o Arequipa, uno se siente tranquilo paseando, incluso al final del día.
En Escápate vivimos aquí desde hace varios años. Recibimos a viajeros de todas partes del mundo, y en la gran mayoría de los casos, todo sale bien.
Precauciones básicas que se deben tener
Como en cualquier parte del mundo, es importante mantener la prudencia, especialmente en las grandes ciudades como Lima.
Aquí van algunos consejos simples:
No mostrar objetos de valor (cámara, teléfono, joyas) de forma llamativa en la calle.
Evitar caminar solo por la noche en barrios poco iluminados o desconocidos.
Usar medios de transporte seguros: taxis del hotel, Uber, Beat u otras aplicaciones locales.
Siempre preguntar en tu alojamiento o a un local de confianza si hay zonas que conviene evitar.
Los hurtos menores, como carteristas, pueden ocurrir, sobre todo en mercados concurridos o buses interprovinciales. Lleva tus pertenencias bien sujetas y, si puedes, usa una mochila o bolso cruzado al frente.
En resumen: nada alarmante, solo algunas precauciones sensatas, como las que se tendrían en París, Barcelona o Roma.
Salud en el viaje: mejor prevenir que curar
Perú no representa grandes riesgos sanitarios, pero su altitud, clima y gastronomía pueden sorprender a quienes no están acostumbrados.
El mal de altura
Es el tema más común al llegar a Cusco (3,400 metros sobre el nivel del mar) o al hacer trekking en los Andes.
Lo que aquí se llama soroche puede provocar dolor de cabeza, cansancio, náuseas o falta de aire los primeros días.
Algunos consejos:
Deja que tu cuerpo se aclimate (evita el esfuerzo físico los primeros días).
Bebe mucha agua.
Evita el alcohol y las comidas pesadas al comienzo.
El mate de coca, una infusión tradicional, puede aliviar los síntomas.
Si tienes dudas o vas a altitudes muy elevadas, un médico puede recetarte un tratamiento preventivo.
Tranquilo: la mayoría de los viajeros experimentan efectos leves y pasajeros. En dos o tres días, uno ya se siente bien.
Alimentación e higiene
Los problemas digestivos son los más comunes entre los viajeros. La cocina peruana es deliciosa, pero puede resultar un poco fuerte para un estómago europeo o norteamericano.
Aquí van algunas recomendaciones:
Nunca bebas agua del grifo. Siempre opta por agua embotellada o filtrada.
Evita los hielos en lugares no turísticos.
No consumas frutas o verduras crudas si no estás seguro de que han sido bien lavadas.
Sé prudente con la comida callejera: algunos puestos son excelentes, otros mejor evitarlos (nosotros te indicamos los mejores).
Llevar un pequeño botiquín digestivo (antidiarreicos, probióticos, sales de rehidratación) puede ser útil en caso necesario.
Vacunas y mosquitos
No se exige ninguna vacuna para entrar a Perú, pero se recomiendan algunas: fiebre tifoidea, hepatitis A y B.
Si vas a visitar la Amazonía, también podrías considerar una profilaxis contra la malaria (consulta con tu médico). En cualquier caso, un buen repelente de insectos es esencial en zonas húmedas.
En resumen: un país para descubrir sin miedo, pero con sentido común
No, Perú no es un país peligroso. Solo requiere un poco de atención, como cualquier destino de viaje. Con algunas precauciones, escuchando los consejos locales y cuidando tu cuerpo, vivirás una experiencia enriquecedora y sin sorpresas desagradables.
Viajar siempre implica salir un poco de la zona de confort. Y eso es justamente lo que hace que Perú sea inolvidable: paisajes imponentes, tradiciones vivas, gente acogedora y una diversidad enorme.
Si tienes alguna duda sobre seguridad o salud durante tu viaje, estamos aquí para orientarte, ayudarte y asegurarnos de que tu experiencia sea tan hermosa como tranquila.